¿Sabía que México tiene su particular versión del «caviar»?

Lo que parece ser una deliciosa ensalada de piñones dista mucho de ser el sueño de cualquier vegetariano.

Los escamoles son judías de color amarillo pálido que parecen alubias y constituyen una especialidad mexicana especialmente característica. Los escamoles son los huevos o larvas de la especie «Liometopum» de hormigas negras gigantes.

Los coleccionistas las llaman «hormigas pedorras» por el fuerte olor que emana de sus nidos. Los escamoles son un ingrediente popular, aunque caro, en Ciudad de México y sus alrededores.

La recolección del caviar del desierto es una tarea difícil.

Los escamoles son un manjar de más categoría que no encontrará en el típico puesto de comida callejera.

Como su nombre indica, este manjar inusual es una especialidad que se encuentra en restaurantes de alta gama. Los populares huevos de hormiga no sólo tienen un parecido pasajero con las huevas de pescado, sino que también se conocen como «caviar mexicano» o «caviar del desierto».

La cosecha de escamoles se realiza en las altiplanicies del centro de México, lejos del mar. En las raíces de las plantas de agave o maguey, los insectos venenosos depositan sus huevos.

Tras una larga travesía por el desierto, los llamados Escamoleros deben localizar nidos de hormigas para recoger sus delicados huevos.

Cada nido sólo produce huevos entre cuatro y cinco veces al año. Todo esto ocurre justo entre febrero y abril, lo que da lugar a una cosecha muy corta.

La recolección es un proceso duro y desagradable debido a la mala accesibilidad, la escasez y el terrible aguijón de la hormiga. Todos estos aspectos contribuyen a la rareza de este manjar mexicano.

Los escamoles pueden costar entre 35 y 100 dólares la libra, de ahí su nombre.

¿Cuál es el sabor de los escamoles?

Según los informes, las larvas tienen una consistencia parecida al requesón y un sabor a nuez o mantequilla.

Los huevos de hormiga únicos no suelen mezclarse con componentes de sabor fuerte, ya que su sabor es tenue y delicado.

En el clásico plato de escamole se utilizan pimientos verdes, cebollas cortadas en rodajas finas y hojas de epazote. Los ingredientes se cuecen juntos durante unos minutos hasta que las alubias estén blancas, y luego se utilizan como relleno de tacos o tortillas.

Los huevos de hormiga tienen una larga historia gastronómica en México. Los aztecas, en cambio, comían escamas, de donde procede el término «pupas de hormiga».

Procede del término náhuatl «azcamolli», que significa «hormiga» y «guiso» en la antigua lengua azteca náhuatl. Cientos de años después, este manjar prehispánico ha llegado a los elegantes restaurantes de Ciudad de México.

Además, este manjar es un artículo único que nunca se agota. Los escamoles no son accesibles fuera de México, ya que es ilegal transportar huevos de hormiga a través de la frontera.