Respuesta 1:
Con semejantes costes, esperaba que fuera algo especial, con todo el mundo deseando poder cenar como los ricos. Sólo sabía a pescado la primera vez que lo probé. ¡Qué terrible decepción! ¿Cuál es el problema con el caviar feliz? Esperaba que supiera a tortilla de patatas, pero no fue así. Es un pez. Me temo que no podré comprarlo porque es muy caro.
Respuesta 2:
Ignorancia palatina, hay ciertas comidas que nadie puede digerir ni comer; es como un buen libro, o un buen automóvil, o un buen reloj, o un traje decente; a algunos les gusta la ropa de Zara, pero no todos saben distinguirlo.
El caviar tiene un fuerte sabor a pescado, tan fuerte que deja un regusto salado en la lengua. Se suele servir con mantequilla y pan tostado, pero sigue teniendo un fuerte sabor a pescado.
Por cierto, si se trata de huevas de pescado, el sabor típico es un intenso sabor puro que casi quema la boca, satura las papilas gustativas y las duerme; es un buen momento para saborear un buen vino, aunque obviamente pierde su esencia porque la viscosidad marítima de las huevas de esturión sigue recorriendo la boca, mejorando el caldo que la atraviesa.
Para empezar, y evitar hacer aguas, una ensalada de patatas con unos langostinos de Huelva y un poco de adorno negro sería una buena manera de entrar en la fuerza de un bello producto.
Aunque no me abstengo del cocido, ni del arroz, ni de los boquerones en vinagre, ni de las ostras… la lista de cosas de las que no me abstengo es enorme….
